Los instrumentos

El tambor

El tambor es un menbranófono de golpe directo que se puede caracterizar como tubular, cilíndrico de dos cueros e independiente. El más antiguo está construido con madera de una sola pieza, el cuerpo central del tambor constituye también su caja de resonancia, que en el caso utilizado en el Corri-Corri presenta una profundidad menor a la de los tambores del centro de Asturias. Esta característica es común, además, a la de la mayoría de los que podemos encontrar en el oriente asturiano. En el cuerpo central consta de dos aros exteriores que, con  la presión ejercida sobre la cuerda sirven para tensar los dos parches del instrumento, hechos normalmente de piel de cabrito y oveja. Acorde a las dimensiones del tambor, los palos suelen ser más pequeños de lo habitual.

Tal y como suele ocurrir en el Oriente de Asturias, éste instrumento se toca colocándolo debajo del brazo izquierdo, que es apoyado en el cuerpo del tambor y con el que se marcan los tiempos débiles o contratiempos. El brazo derecho coge el otro palo, y se marcan los tiempos fuertes, los acentos y los tres toques con los que comienza y finaliza el baile.

La tamboritera suele colocarse en el centro y las tocadoras de pandorios a su lado.

EL PANDORIU

Completan el plano de la percusión los pandorios, un membranófono de golpe directo. Consta de un aro de madera con sonajas, al que se le acopla un único parche de piel. Es característico la incorporación de un mango de madera, que se agarra con la mano derecha. Por su parte, el brazo izquierdo queda arqueado para golpear el parche con el pulgar y con el resto de los dedos.

En el Corri-Corri el pandoriu también es tocado por mujeres, quienes suelen hacerlo formando un número par, como solemos decir: “Los pandorios tienen que ser pares, sino el tambor va coju”.

El pandoriu es un instrumento singular en la tradición musical asturiana ya que solo se ha podido documentar su utilización en el baile del Corri-Corri.

LA LETRA

La letra con que se acompaña la melodía del baile en la actualidad es el llamado “Romance de la Peregrina y el Pastor”, que narra un milagro de la Virgen del Rosario. Como es habitual en otros bailes y danzas romancescos integran estribillos que inician, se intercalan o ponen punto final al texto. En el Corri-Corri se cantan dos:

(1)Válgame Nuestra Señora

Válgame la Madre Santa,

Válgame Nuestra Señora,

Nuestra Señora me valga.

(2) Válgame Nuestra Señora

Válgame el Señor San Pedro

Válgame Nuestra Señora

Madre del divino verso

En los últimos años ha habido diferentes interpretaciones de la canción por diferentes artistas asturianos como Hevia o  Muyeres.